La excentricidad de Jordie Lunn no tiene límites. No sólo es particular su forma de vestir sino también su manera de entender el Freeride. En algunos momentos pensarás que se le ha ido la olla, pero el es así.

La excentricidad de Jordie Lunn no tiene límites. No sólo es particular su forma de vestir sino también su manera de entender el Freeride. En algunos momentos pensarás que se le ha ido la olla, pero el es así.